Durante los pasados jueves, viernes y sábado he tenido la inmensa fortuna de haber podido participar en la XVII Feria de la Ciencia de Sevilla, junto a mis alumnos y compañeros del IES La Campiña con el proyecto que nombramos como "Ciencia de tronos". Dirigir un proyecto de tal envergadura no es sencillo, y los tres días de la feria suponen la culminación de casi un curso completo de intenso trabajo por parte de todos, y al final la experiencia ha sido, como en años anteriores, agotadora, pero muy positiva. Como ya hiciera el año pasado, hoy no podía perder la oportunidad de compartir por aquí lo que ha supuesto esta actividad para nosotros.