En este post desgranaremos con mayor detalle la base biológica que hay detrás de los Pokémon tipo Fuego, y que ya comentamos de manera más breve en el correspondiente vídeo de Ficción científica. Como el formato de vídeo en YouTube es más fresco, más dinámico y evidentemente más corto, no da para explicaciones más largas y precisas, por lo que me he decidido a hacer este post como complemento.
Pokémon tipo Fuego. Fuente |
Tras el primer post dedicado a los Pokémon tipo Planta, continuamos hoy con el estudio de la Biología de los Pokémon de tipo Fuego, así que por un momento nos convertiremos todos en aprendices de entrenadores Pokémon y comenzaremos a recorrer la Pokédex en busca de aquellos que están relacionados de una u otra manera con el fuego:
Los Pokémon de tipo fuego son unos seres impresionantes y aunque normalmente se basan en muchas criaturas de las leyendas y mitos, pero nosotros escarbaremos un poquito en ese aspecto ígneo y destacaremos la relación con seres vivos del mundo real.
Empezamos, por supuesto, con el simpático #004 Charmander, uno de los Pokémon iniciales de la primera generación. Como nos indica la terminación de su nombre, que proviene del inglés Salamander, creo que podemos decir que no se parece tanto a una salamandra, sino que su aspecto es más bien reptiliano. Sabemos también que las salamandras reales NO son reptiles, sino anfibios, por lo que hablar de este simpático pequeño en terminos de salamandra puede llevar a confusión entre estos dos grupos de vertebrados. Quizás debamos echar un vistazo a las diferencias entre reptiles y anfibios, que pueden aclarar mucho en qué fijarnos para diferenciarlos:
Si tenemos que buscar una especie en el mundo de las salamandras podemos irnos a la Ensatina xanthopicta, un urodelo norteamericano cuya taxonomía es compleja, pero que tiene ejemplares con coloración anaranjada muy parecida a la de Charmander.
#005. Charmeleon mantiene ese diseño reptiliano de Charmander, pero se decanta más hacia el mundo de los reptiles, sobre todo si atendemos tanto a su nombre, como a la prolongación ósea al final de la cabeza, parecida a la del camaleón. Tiene una cola prensil como los camaleones, aunque no la usa para sujetarse a los árboles, sino para luchar, y tampoco se tiene la capacidad de cambiar de color de los camaleones, por lo que aquí acaban las similitudes entre ellos. Probablemente Charmeleon carece de los cromatoforos del reptil real, es decir no tiene células con pigmentos que reflejen la luz y respondan a hormonas o neurotransmisores para provocar estos cambios. La especie Trioceros cristatus, puede ser un buen representante para parecerse a Charmeleon.
Obviamente #006 Charizard está basado en los dragones de las leyendas europeas y paradójicamente en el mundo Pokemon no es de tipo Dragón, aunque una de sus evoluciones, #006 Mega Charizard X sí lo es, sin embargo, y #006 Mega Charizard Y, no. El color de la llama azul de Mega Charizard X se puede explicar científicamente, puesto que en el mundo Pokémon es posible que funcione igual que en el mundo real, y las llamas presenten distintos colores según su temperatura o la sustancia química en combustión. Esto mismo pasa también en otros Pokémon, como los llamado variocolor. Si hablamos de estos dragones, es inevitable que nos acordemos de los grandes dragones del mundo real: los dragones de Komodo, Varanus komodensis. La denominación de los Mega Charizard nos recuerda además a los cromosomas sexuales X e Y, pero curiosamente la determinación del sexo en los dragones de Komodo y muchas especies de reptiles no es exactamente así, aunque si parecido. Las hembras de dragón serían ZW, mientras que los machos serían ZZ. La determinación del sexo también es mediante dos cromosomas sexuales, pero llamados Z y W, siendo la hembra el sexo heterogamético y el macho, el sexo homogamético, al contrario de lo que ocurre en la especie humana. Podríamos hablar también de partenogénesis a partir de estos animales, pero mejor os remito a este artículo, donde se explica mejor.
#005. Charmeleon mantiene ese diseño reptiliano de Charmander, pero se decanta más hacia el mundo de los reptiles, sobre todo si atendemos tanto a su nombre, como a la prolongación ósea al final de la cabeza, parecida a la del camaleón. Tiene una cola prensil como los camaleones, aunque no la usa para sujetarse a los árboles, sino para luchar, y tampoco se tiene la capacidad de cambiar de color de los camaleones, por lo que aquí acaban las similitudes entre ellos. Probablemente Charmeleon carece de los cromatoforos del reptil real, es decir no tiene células con pigmentos que reflejen la luz y respondan a hormonas o neurotransmisores para provocar estos cambios. La especie Trioceros cristatus, puede ser un buen representante para parecerse a Charmeleon.
Obviamente #006 Charizard está basado en los dragones de las leyendas europeas y paradójicamente en el mundo Pokemon no es de tipo Dragón, aunque una de sus evoluciones, #006 Mega Charizard X sí lo es, sin embargo, y #006 Mega Charizard Y, no. El color de la llama azul de Mega Charizard X se puede explicar científicamente, puesto que en el mundo Pokémon es posible que funcione igual que en el mundo real, y las llamas presenten distintos colores según su temperatura o la sustancia química en combustión. Esto mismo pasa también en otros Pokémon, como los llamado variocolor. Si hablamos de estos dragones, es inevitable que nos acordemos de los grandes dragones del mundo real: los dragones de Komodo, Varanus komodensis. La denominación de los Mega Charizard nos recuerda además a los cromosomas sexuales X e Y, pero curiosamente la determinación del sexo en los dragones de Komodo y muchas especies de reptiles no es exactamente así, aunque si parecido. Las hembras de dragón serían ZW, mientras que los machos serían ZZ. La determinación del sexo también es mediante dos cromosomas sexuales, pero llamados Z y W, siendo la hembra el sexo heterogamético y el macho, el sexo homogamético, al contrario de lo que ocurre en la especie humana. Podríamos hablar también de partenogénesis a partir de estos animales, pero mejor os remito a este artículo, donde se explica mejor.
Volvemos a recurrir a la mitología para hablar de #037 Vulpix, un pequeño zorro rojo con seis colas, ya que tanto él como su evolución, Ninetales, un zorro albino de nueve colas, están basados en los kitsunes, zorros mitológicos del folclore japonés cuyo poder aumentaba con el número de colas, siendo el más poderoso el de nueve, que también tiene poderes místicos y vive miles de años. No son los únicos zorros de tipo fuego, pero comenzaremos hablando de ellos. Vulpix toma su nombre del de los zorros comunes o zorros rojos, Vulpes vulpes, por lo que la correspondencia es más que clara, pero es que además, la forma blanca del Vulpix de Alola, se corresponde perfectamente con el zorro ártico, Alopex lagopus. Ambos son iguales de adorables.
#038 Ninetales representa a un zorro albino, tanto por su color amarillento, casi blanco, como por la tonalidad roja de los ojos. El albinismo se caracteriza por una carencia de pigmentación, debido a la falta de producción de melanina, por lo que la única pega que le podemos poner a Ninetales para que no represente fielmente a un zorro albino es la presencia de esa pequeña naricilla oscura, que también debería ser de tonos rosados. En el zorro ártico, a pesar del pelaje blanco, se observa perfectamente como hay pigmentación en los ojos, en las orejas y en el hocico, por lo que claramente podemos diferenciarlo de los ejemplares albinos de zorro rojo. ¿Y que hay de la forma de Alola de Ninetales? ¿También es albino? No, claramente no, podríamos hablar de que Ninetales representa a un zorro rojo leucístico, totalmente blanco, pero en este caso, al contrario de lo que ocurre con el albinismo, que es una enfermedad, el leucismo es simplemente una condición genética, en la que el animal está perfectamente sano.
#038 Ninetales representa a un zorro albino, tanto por su color amarillento, casi blanco, como por la tonalidad roja de los ojos. El albinismo se caracteriza por una carencia de pigmentación, debido a la falta de producción de melanina, por lo que la única pega que le podemos poner a Ninetales para que no represente fielmente a un zorro albino es la presencia de esa pequeña naricilla oscura, que también debería ser de tonos rosados. En el zorro ártico, a pesar del pelaje blanco, se observa perfectamente como hay pigmentación en los ojos, en las orejas y en el hocico, por lo que claramente podemos diferenciarlo de los ejemplares albinos de zorro rojo. ¿Y que hay de la forma de Alola de Ninetales? ¿También es albino? No, claramente no, podríamos hablar de que Ninetales representa a un zorro rojo leucístico, totalmente blanco, pero en este caso, al contrario de lo que ocurre con el albinismo, que es una enfermedad, el leucismo es simplemente una condición genética, en la que el animal está perfectamente sano.
No salimos de Japón para explicaros que #058 Growlithe y #059 Arcanine provienen de esas famosas estatuas que parecen una mezcla entre perro, león y tigre, llamadas Shisa y Komainu. Precisamente, a Arcanine se le considera popularmente como legendario, aunque no lo sea estrictamente. La raza de perro a la que podrían corresponder estos Pokémon sería Shiba Inu.
#077 Ponyta es un poni mientras que #078 Rapidash es un caballo, que además tiene un cuerno que recuerda al de los unicornios. El fuego de ambos también tiene origen mitológico, pues están basados en los corceles de fuego del dios griego Helios, así como en otros caballos de la mitología nórdica e hindú. Los caballos pertenecen a la especie Equus ferus caballus, al igual que los ponis, que también son de la misma especie, pero de tamaño más pequeño. Las razas más puras y primitivas de ponis actuales conservan caracteres primitivos, como rayas a lo largo del lomo, o incluso en las patas, y crines tupidas. Se piensa que los antepasados recientes de los actuales caballos eran aproximadamente de la alzada de los ponis, y a medida que se fueron domesticando ganaron mayor altura a consecuencia de la selección artificial para la mejora de la especie.
Hablaremos más de #105 Marowak en el tipo tierra, pero su versión de Alola, que es mezcla de tipo Fuego y tipo Fantasma, se basa en los bailarines de Samoa (un país formado por varias islas del Pacífico Sur), que usan bastones de fuego en su danza tradicional. Desde el punto de vista animal, es difícil asignarle una especie concreta, pero parece que podría tratarse de un reptil bípedo, como muchas especies de dinosaurios. El cráneo que lleva sobre la cabeza a modo de máscara, tiene dos cuernecillos que recuerdan ligeramente a las protuberancias óseas del Carnotaurus, por lo que podría ser una pista más del animal que estamos buscando, salvando las diferencias de tamaño.
#126 Magmar es muy extraño y tiene elementos de iguana y salamandra, y podríamos decir que también de ave, por ese pico muy similar al de las anátidas. Está basado en un Karura, una ser divino de la mitología japonesa, con cuerpo de hombre y cabeza de pájaro, capaz de escupir fuego. Sus pre y post-evoluciones #240 Magby y #467 Magmortar también se basan en el Karura. Pero más que intentar encontrar una relación con el reino animal, podemos basarnos en sus nombres para relacionarlos con el magma, la mezcla de roca fundida y gases que se encuentra en el interior de nuestro planeta.
Con las evoluciones de Eevee tenemos que volver a los zorros, ya que #136 Flareon guarda ciertas similitudes con su predecesor, y por lo tanto ambos se basan también en el zorro rojo, Vulpes vulpes. Pero el pelaje de Flareon y su distribución de color también recuerda al pelaje del león o incluso al de la raza de perros pomerania. Las evoluciones de Eevee pueden dar mucho fuego en su relación con los zorros y sus diferentes especies y adaptaciones a distintos medios, pero eso es tema para otro post.
#146 Moltres está inspirado en varios pájaros de fuego legendarios, siendo el más claro el famoso ave fénix. Podría decirse que también resurge de sus propias cenizas, pues Moltres se sumerge en magma cuando está herido para arder y curarse completamente. También tiene características de garza, sobre todo en el plumaje de su cabeza. De hecho, la garza imperial, Ardea purpurea, tiene colores rojizos parecidos a los de Moltres. Y hablando de fénix, en el mundo real tiene su homenaje en el nombre científico de los flamencos, pertenecientes al género Phoenicopterus.
La familia de #155 Cyndaquil, uno de los Pokémon iniciales de la segunda generación, está formada por animales parecidos a los mustélidos de nuestro mundo. El pequeñín recuerda a un bebé de tejón melero, pues su tercera evolución #157 Typhlosion equivaldría a un adulto de este tejón, cuyo nombre científico es Mellivora capensis. Pero Cyndaquil también recuerda a un equidna, especialmente con sus llamas en forma de púas, aunque el tenrec Hemicentetes semispinosus tiene un patrón de distribución de colores y un parecido también muy razonable.
La segunda evolución de los anteriores #156 Quilava es una comadreja o un armiño, Mustela nivalis y Mustela erminea, respectivamente, siendo sus llamas similares por ubicación, forma y tamaño a las del puercoespín crestado, Hystrix cristata. Tanto Cyndaquil como Quilava usan sus puas-llamas como mecanismo de defensa, entre otras cosas, igual que los equidnas y puercoespines en los que se inspiran.
La segunda evolución de los anteriores #156 Quilava es una comadreja o un armiño, Mustela nivalis y Mustela erminea, respectivamente, siendo sus llamas similares por ubicación, forma y tamaño a las del puercoespín crestado, Hystrix cristata. Tanto Cyndaquil como Quilava usan sus puas-llamas como mecanismo de defensa, entre otras cosas, igual que los equidnas y puercoespines en los que se inspiran.
#218 Slugma es una babosa que por su color podría recordar a Arion rufus, una babosa terrestre, pero creo que se parece aún mas a Hexabranchus sanguineus, un nudibranquio, es decir, una babosa marina. ¿Un momento? ¿acabo de decir babosa marina? Pero si estamos hablando de Pokémon de tipo Fuego, ¿es esto posible? Recordemos que Slugma está hecha de magma, y el magma puede fluir perfectamente desde el interior de la tierra hacia fuera a través de las dorsales, en los fondos oceánicos, así que no hay ningún problema para asignarle el nudibranquio, a pesar de su composición ígnea. Hexabranchus sanguineus significa literalmente "seis branquias de color sangre" y el nombre vulgar que suele recibir este extraordinario animal es bailarina española.
#219 Magcargo por su parte es un caracol con una concha de roca, con pequeñas grietas por las que asoma el magma, o la lava, que recuerda al gasterópodo Victaphanta atramentaria. El cuerpo de ambos, Slugma y Magcargo, está formado por lava y están inspirados en los Cherufe, seres mitológicos formados por magma y roca, que habitan en los volcanes chilenos.
#219 Magcargo por su parte es un caracol con una concha de roca, con pequeñas grietas por las que asoma el magma, o la lava, que recuerda al gasterópodo Victaphanta atramentaria. El cuerpo de ambos, Slugma y Magcargo, está formado por lava y están inspirados en los Cherufe, seres mitológicos formados por magma y roca, que habitan en los volcanes chilenos.
El caso de #244 Entei es similar al de Arcanine, pues se basa en las estatuas de los leones imperiales guardianes de China. Uno de los animales mas populares de la iconografía y decoración China es el león, Panthera leo, aunque curiosamente, ni existen, ni nunca han existido leones en estado salvaje en China. Se suelen representar de dos en dos, y ambos con melena, por lo que podríamos pensar que ambos sean machos, pero uno de ellos lleva una bola bajo sus garras, y otro suele estar sujetando a un cachorro, lo cual representaría a la hembra. El hecho de que los dos lleven melena se suele deber a que los escultores nunca habían visto un león de verdad, y la imagen original que los primeros escultores crearon a partir de ejemplares mantenidos en zoológicos, mantuvieron la imagen característica de la melena, incluso también en los cachorros.
Y al igual que Moltres, #250 Ho-Oh también es un fénix mitológico. Concretamente su versión china: el Fenghuang, y su plumaje con los colores del arco iris. Esto nos lleva a fijarnos en que los colores de su plumaje son bastante parecidos a los del espectacular macho de faisán dorado, Chrysolophus pictus, que habita precisamente en China.
Pasamos a la familia de pollos de fuego, que comienza con el pequeño #255 Torchic, un polluelo, que da lugar cuando evoluciona a #256 Combusken, #257 Blaziken y #257 MegaBlaziken que son gallos de pelea adultos, muy parecidos a la variedad Shamo japonesa. También se basan en el Basan ¡valga la redundancia! que es un pollo mitológico del folclore japonés, que como no podía ser de otra manera, escupe fuego. La especie a la que pertenecen todos los pollos y gallinas domésticos, es Gallus gallus domesticus.
#322 Numel, es un pequeño dromedario, Camelus dromedarius, ya que sólo tiene una joroba. Al evolucionar #323 Camerupt, un camello, Camelus ferus o Camelus bactrianus, sus dos jorobas se transforman además en peligrosos volcanes. En este caso, en sus jorobas-volcán, en vez de grasa, que después pueden convertir en agua por reacciones metabólicas, estos camellos almacenan magma.
#324 Torkoal es una tortuga gigante, cuyo caparazón es literalmente un horno de carbón, del que obtiene energía al quemarlo en su interior. La forma corporal y el tamaño de este imponente quelonio recuerda a la de las tortugas gigantes de las islas Galápagos, Chelonoidis nigra. Seguramente que a Charles Darwin le hubiera encantado tener una Torkoal en casa, para poder estudiar la evolución en las frías noches londinenses.
El nombre de #390 Chimchar engaña, ya que parece un chimpancé, pero tiene más en común con un bebé de babuino, con grandes orejas y un pequeño hocico, además del copete de su cabeza. Su color de pelaje le acerca al babuino sagrado egipcio, Papio anubis. #391 Monferno mantiene estas características, además de tener colores como los de los mandriles, Mandrillus sphinx. #392 Infernape también cuenta con esos colores de mandril, pero su melena y su cola recuerdan al gelada, Theropithecus gelada. El hecho de que pertenezcan también al tipo lucha les viene por la famosa leyenda del Rey Mono, Sun Wukong y su estilo de combate y agilidad.
#485 Heatran no deja de ser material volcánico solidificado, pero mezclado con partes que recuerdan a un insecto. De hecho también puede trepar por las paredes y tiene comportamientos similares a los de muchos insectos, lástima que no tenga tres pares de patas, sino solo dos, sino podríamos encontrar alguna semejanza con alguna especie o tipo concreto.
El pequeño #498 Tepig es un cerdito que se acaba transformando en #500 Emboar, un enorme jabalí con cuerpo de luchador de sumo, pasando por #499 Pignite, que es un luchador de lucha libre. Los tres también se basan en Zhu Bajie, un cerdo demoníaco del cuento Viaje al Oeste, como Sun Wukong. Posiblemente Tepig esté basado en las razas porcinas inglesas Saddleback o Hampshire, que tienen una distribución de colores de la piel parecida, y los otros dos son híbridos entre éstos y los jabalíes.
#513 Pansear y #514 Simisear tienen la misma relación con los chimpancés y los simios en su nombre y aspecto, que sus homólogos de tipo planta y agua. Así que por no repetir, os diremos que este trío emula a los tres monos sabios japoneses, cada uno con su propio gesto de "no hablo", "no oigo" y "no veo". Como ya dijimos en el post de tipo Planta, Pan es el género al que pertenecen bonobos y chimpancés.
#554 Darumaka y #555 Darmanitan son muñecos daruma japoneses. De hecho la forma alterna de Darmanitan se llama tal que así, Daruma y es inanimada, como un muñeco. También aúna a los tres monos sabios, ya que no ve, ni habla, ni escucha. Desde el punto de vista biológico, que es el que a nosotros nos interesa, Darmanitan también tiene características de orangután, como el color de su pelaje y la posición al caminar.
#631 Heatmor es un oso hormiguero, probablemente un Myrmecophaga tridactyla, según las tres garras que tienen en sus patas delanteras. Esa condición de oso hormiguero explica su rivalidad con la hormiga Durant, que es doblemente débil al fuego debido a su tipo Bicho / Acero. Si los osos homigueros reales usan su lengua para comer hormigas, Heatmor usa la suya para derretir a enemigos como Durant.
Y una vez más, volvemos con los zorros, pues la familia de #653 Fennekin está formada, como su nombre indica, por fénecs, zorros desérticos del Sáhara y el Sinaí, cuyo nombre científico es Vulpes zerda. En ambos casos, en el Pokémon y en el zorro real, la gran superficie de sus peculiares orejas de las sirven como medio para disipar calor. La forma adulta #655 Delphox, tiene aspecto de hechicero, y su nombre evoca al mítico oráculo de Delfos, que predecía el futuro, exactamente igual que este Pokémon. La forma intermedia #654 Braixen es una hembra, y su nombre viene de la suma de bruja + vixen, que es como se les llama a las hembras de zorro en inglés. La forma de sus orejas y su aspecto también recuerda ligeramente al feneco, aunque también al zorro de orejas de murciélago, Otocyon megalotis.
El pequeño petirrojo japonés, Fletching, no es de tipo fuego, pero sí lo son sus evoluciones: #662 Fletchinder también parece un petirrojo pero su tipo fuego apuntan más a la especie petroica flamígera, que curiosamente vuelve a mencionar al fénix en su nombre científico, Petroica phoenicea. #663 Talonflame es muy parecido a un halcón peregrino, Falco peregrinus, precisamente por su forma de cazar descendiendo en picado, aunque sus colores se asemejan más al cernícalo primilla, Falco naumanni, y su cabeza a la aviceda australiana, Aviceda leuphotes. En cualquier caso, todos ellos son rapaces.
No hay duda posible con #667 Litleo, un cachorro de león, Panthera leo, siendo ya la tercera vez que aparece este felino en este post. El pelaje de #668 Pyroar depende de su género. El macho tiene una gran melena de león, y la hembra tiene menos pelo como las leonas. Igual que en una manada real, los Pyroar macho son mucho menos habituales que las hembras, y son estas las que protegen a los cachorros.
#721 Volcanion de nuevo toma su apariencia de las estatuas Shisa y Komainu, aunque de manera más sutil que Arcanine. Aparte de su forma de volcán, también guarda fuerte relación con los géiseres y con las máquinas de vapor, tal y como puede verse en sus estructuras. Como hemos podido comprobar en este y otros Pokémon de fuego, no solo la Biología, sino también la Geología está muy presente en este tipo fuego.
#721 Volcanion de nuevo toma su apariencia de las estatuas Shisa y Komainu, aunque de manera más sutil que Arcanine. Aparte de su forma de volcán, también guarda fuerte relación con los géiseres y con las máquinas de vapor, tal y como puede verse en sus estructuras. Como hemos podido comprobar en este y otros Pokémon de fuego, no solo la Biología, sino también la Geología está muy presente en este tipo fuego.
La última familia inicial de nuevo vuelve a estar formada por felinos. #725 Litten es un gato atigrado, al igual que su evolución #726 Torracat que está mezclado con un cachorro de tigre, Panthera tigris. La evolución final, #728 Incineroar, es un tigre ya adulto. Además se inspira en la figura del Rudo, un tipo de luchador del wresting, que hace el papel de villano, cruel y cobarde y se enfrenta al luchador heroico. Incineroar también presenta esta mismo carácter rudo y egoísta.
Y acabamos con #776 Turtonator, una tortuga Mata mata, Chelus fimbriata, cuyo caparazón tiene reminiscencias a una mina terrestre. Prueba de ello, es que es altamente explosiva. La forma de la cabeza e incluso algunos detalles del mismo caparazón son básicamente iguales a los de la tortuga real.
Como habéis podido comprobar, los Pokémon tipo Fuego son realmente alucinante. Y aunque es cierto que no existen seres vivos que escupan fuego o lo lleven en su cola en el mundo real, como muchos de los que hemos descrito anteriormente, en nuestro planeta nos encontramos seres igual de fascinantes, que presentan habilidades tan llamativas como la bioluminiscencia, pero ya hablaremos de ella más adelante, en el tipo Eléctrico, aunque los próximos en visitarnos serán los del tipo Agua.
Los animales reales no se parecen en nada a los Pokemon se ven muy distintos dios mío ¿charmeleon? ¿vulpix y ninetales? nada nada, los Pokemon en la RA y los dibujos y listos.
ResponderEliminarme encantan tus entradas sobre pokemon! muy interesantes. Gracias por el tiempo que le has dedicado
ResponderEliminarDios mio! vaya trabajo de artículo. No quiero imaginarme el tiempo que has tardado en completar toda la información. Te felicito!
ResponderEliminarPrimer anonimo: Hater...
ResponderEliminarA los otros dos muchas gracias. Un saludo