Dos experiencias en Educación Primaria

Los pasados jueves y viernes tuve la oportunidad de acudir a dos de los centros de educación Primaria de mi localidad, Arahal, para dos actividades diferentes, pero igual de gratificantes, y como es de recibo quiero compartir mis experiencias por aquí.

El jueves día 20 acudí al CEIP El Ruedo, donde la maestra de mi hija menor Irene, Mónica, me invitó a dar una charla a los niños de la clase. A sabiendas de que habían trabajado el tema de los minerales, hace ya un tiempo decidí preparar una presentación centrada en la serie de animación Steven Universe y con presencia de los Vengadores del Universo Cinematográfico Marvel, para hablar de rocas y minerales a los compañeros de mi hija.

Se trata de una clase de 2º de Primaria, y han visto este tema por encima, pero me dispuse a mostrarles algunas pinceladas de Geología, hablando de elementos químicos, minerales, rocas, fósiles... y las Gemas de Cristal de Steven Universe y las Gemas del Infinito de Marvel fueron la excusa perfecta para introducirlos en este fascinante mundo. El título de la charla fue "Hasta las Gemas del Infinito y más allá".

La charla, de una hora de duración fue en el SUM del colegio y no solo asistió a ella la clase de 2º B de la maestra Mónica, sino que también asistió el grupo de 2º A, con su maestra Carmina. Ver allí a esos 50 niños expectantes por oír lo que yo les iba a contar no tiene precio, y los chiquillos se portaron estupendamente, estando enganchados en la charla desde el primer momento.

Ayudó mucho hacer un poco el payasete con las Gemas del Infinito y sacar de una caja de folios un montón de rocas y minerales que me ayudaron a explicar algunas características, propiedades y usos de los ejemplares que les iba mostrando en pantalla. Creo que los chavales se lo pasaron en grande aprendiendo sobre las piedras que iban viendo y que estaban deseando tocar y no pararon de preguntar durante toda la charla, al igual que en el turno que abrimos al final de ella. Después también tuvieron un tiempo para coger, tocar, manipular... todos los ejemplares, que aprovecharon para bombardearme a preguntas de nuevo.

Al terminar, Mónica me dio las gracias y yo se las di a ella por aquella oportunidad, y entonces para mi sorpresa, Irene se acercó para entregarme un dibujo dedicado de toda la clase y hecho colaborativamente entre todos, en agradecimiento tanto a mí, como a Macarena, que también estuvo hablando de Medicina en la clase hace unas semanas. Fue bastante emocionante que mi pequeña me entregara el detalle, pero sobre todo haberla visto disfrutar durante la charla. No siempre puede uno tener de público a sus hijas, y el CEIP El Ruedo ya me ha dado la oportunidad e hablar ante mis dos niñas, ya que el año pasado estuve en clase de Marta.

Con el pecho henchido de orgullo, me fui del colegio, deseando que, después en casa, Irene me contara sus impresiones y lo que le habían dicho sus amigas y compañeros. El feedback que me dio después fue genial también, porque los demás niños no paraban después de preguntarle sobre lo que les había explicado. Así que de nuevo lo digo y no me cansaré, ¡GRACIAS MÓNICA, GRACIAS CEIP EL RUEDO!

La segunda experiencia que quiero contar es la del pasado viernes 21, cuando acudí al CEIP Manuel Sánchez Alonso, donde se ubica la emisora escolar de Radio Paz, donde tengo el placer de colaborar desde hace ya unos años, preparando la sección mensual de Educar con la Ciencia. Pero esta vez acudía de forma diferente ya que la encargada del proyecto, María José, me había invitado a ir en calidad de invitado para la sección la Entrevista de la Semana, donde van un montón de personas conocidas tanto de la localidad como de fuera, lo cual suponía un gran honor para mí. Tengo que agradecer que esto se ha llevado a cabo por mediación de Manu, maestro de 5º de dicho colegio. 

Una vez allí, me trataron estupendamente, como siempre que voy, y me invitaron a un café antes de empezar la entrevista. Una vez en el aula-estudio con Antonio Brenes, maestro jubilado al que también le tengo gran cariño, y Mª José, junto con dos alumnos a los controles técnicos, y tres chicas y un chico como locutores, me sentí muy cómodo a la vez que un poco nervioso, puesto que ir de invitado no es lo mismo que ir controlando uno mismo la sección.

La entrevista he de reconocer que me encantó, y como ya he comentado en algún sitio, me pareció una de las mejores entrevistas que me han hecho nunca, y ya llevo unas cuantas. Se notaba el cariño y la documentación con la que la habían preparado, además de la mano del maestro Manu. Disfruté mucho respondiendo a cada una de las preguntas, y aunque fui comedido, por encontrarme tan cómodo, temía pasarme y enrollarme demasiado.

Tras finalizar la entrevista vino una sorpresa que jamás me hubiera esperado y es que los chicos de la clase de Manu, tanto los que habían participado como locutores o en los controles técnicos me empezaron a pedir que les firmara autografos (¡Autógrafos!), y ni corto ni perezoso empecé a hacerlo mientras ellos se ponían en fila a esperar. Estaba alucinando con esa situación, pero me hizo mucha gracia y le dediqué a cada uno de ellos unas palabras intentando personalizar lo máximo posible. Espero haber acertado.

Tras los autógrafos nos fuimos a su clase y allí estuve un rato más hablando con ellos, e incluso me invitaron a probar una deliciosa gelatina de sandía y me enseñaron los dibujos que estaban coloreando, que eran las fichas de Ciencia de tronos que habíamos dado en la feria de la Ciencia y que su maestro les había facilitado. Podéis imaginar que estaba encantado allí. Tras preguntarme por el personaje que llevaba en la camiseta, les dije que era mi tocayo Carl Von Linneo y les conté un poco sobre su importancia y su aportación a la Ciencia, y les pedí que me firmaran ellos también el guión de la entrevista, puesto que a mí me hacía ilusión también llevarme el sentir de esos pequeños curiosos.

Como me tenía que marchar, me despedí de aquellos chavales y de Manu, no sin antes sacarme una foto tanto con el maestro como con los alumnos y de nuevo volvieron a sorprenderme dándome un montón de abrazos que no esperaba. En la Educación Secundaria y el Bachillerato, sea por la edad de los chicos, o por la propia dinámica de funcionamiento de los institutos no se da la circunstancia normalmente de recibir o dar abrazos y para mí fue una experiencia nueva que sinceramente me sorprendió. 

De nuevo salí de un colegio, por segundo día consecutivo, con las pilas recargadas, lleno de satisfacción y abrumado por tantas nuevas experiencias. Así que de nuevo toca agradecer. ¡GRACIAS CHICOS, GRACIAS MANU, GRACIAS Mª JOSÉ Y GRACIAS CEIP SÁNCHEZ ALONSO!

También lo digo muchas veces, y no temo repetirme: creo que todos los docentes deberíamos tener la oportunidad de vivir estas experiencias cambiando de etapa o lugar donde poder ejercer, aunque sea por poco tiempo. No estaría mal que profesores universitarios vivieran un par de días dando clase en Bachillerato, o profesores de ESO y Bachillerato pudieran intercambiarse por maestros de Primaria, y por supuesto al revés, que los maestros pudieran trabajar un par de días en un instituto o los profesores de Secundaria pudieran convertirse en profesores universitarios durante un día. Creo que todos saldríamos ganando, aprenderíamos mas unos de otros y al final, nuestros alumnos, de todos los niveles, serían los verdaderos beneficiados de esto. Pero bueno es solo una opinión personal. En mi caso, cuando he vivido estas experiencias las he disfrutado mucho y de cada una de ellas he sacado muchos aprendizajes para seguir mejorando tanto en mi labor docente, como en mi propia vida personal. A todos, gracias.

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Fotos en el CEIP El Ruedo cortesía de Mónica Segura.
Fotos en Radio Paz cortesía de Mª José Jiménez.