"Leer en una playa tranquila al atardecer es un gran placer."
Ayer mientras disfrutaba de una magnífica tarde de playa con la familia, terminé de leer “Con mucho gusto. Un menú cuajado de historias botánicas”, de mi buen amigo y gran botánico Eduardo Bazo, @Loeflingia, en la Editorial Cálamo.
El libro es una delicia, un completo menú, en el que Eduardo nos muestra sus amplios conocimientos botánicos. Y aunque ya me lo imaginaba antes de leerlo, por el buen hacer del utrerano, lo he confirmado tras terminarlo.
Uno de los puntos fuertes de esta obra es que a pesar de tratarse de historias botánicas, están aderezadas con relatos de la historia, el arte, la cultura y la sabiduría popular, la divulgación científica; de hecho aparecen mencionados un montón de amigos divulgadores; el cine, la literatura… Se nota que Eduardo es un hombre culto, que cuida al detalle cada frase que escribe. Sin duda, es un libro muy recomendable para leer entero, del tirón, o disfrutar de cada uno de sus capítulos a modo de ensayo individual.
Las 29 historias que recoge tienen el hilo conductor de la botánica, sobre todo la que encontramos en recetas y platos que comemos habitualmente, aunque también tienen cabida otros asuntos en los que por lo que sea las plantas son las protagonistas. Incluso aparecen algunas recetas poco conocidas, ¡ojo, que no es un libro de recetas ni mucho menos! Por destacar algunas de las historias que cuenta Eduardo, nombraré algunas de las que mas me han llamado la atención, por supuesto intentando no hacer spoilers:
- La jodienda no tiene enmienda. Empieza fuerte el libro, hablando de ¡sexo! Y no piensen que está hecho solo para llamar la atención, que el capítulo está plenamente justificado. ¿Es el ginseng la panacea? Si leen este capítulo lo descubrirán.
- ¿Otra vez te la dieron con queso? ¡Menudo cuajo! Anda que no molan nada los juegos de palabra de los títulos. Además, nos dejan claro de que trata cada capítulo. Muy curioso éste también.
- Lo que Masterchef omite. No tenía ni idea de lo que se cuenta aquí, pero es de justicia que Eduardo lo saque a relucir en su libro.
- Con las setas, el ojo siempre alerta. Un episodio muy cinematográfico que se te mete de pleno en una investigación micológica. Me encanta.
- Culturistas que saben de botánica. En este capítulo, el autor nos abre su corazón y nos descubre un mundo sobre el que existen muchos prejuicios por total desconocimiento. Gracias.
- Historias pavorosas. ¿Cuántas veces no hemos oído las frases "que viene el coco" o "cuidado con el hombre del saco"? ¿Qué no tiene nada que ver esto con la botánica? Anda que no...
Y estos son solo algunos, otros títulos llamativos son "Nacionalismo gastronómico", "Sabiduría botánica", "Una merienda psicotrópica", "Les presento a... ¡Los Spice Boys!" y muchos otros más que componen este fantástico menú.
Si alguien pensaba que ya la cosa no podía ser mejor, un último apunte. El prólogo es de otro gran divulgador científico, Daniel Torregrosa, autor del blog Ese punto azul pálido y del libro "Del mito al laboratorio".
Ya lo saben, si no tienen ni idea sobre qué leer este verano, háganse con un ejemplar de "Con mucho gusto", de Eduardo Bazo. Mi más sincera enhorabuena a Edu y mi deseo de ver alguna de estas historias convertida en charla divulgativa en un futuro no muy lejano. ¡Bravo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario