El pasado viernes 22 de septiembre fue un día muy especial que guardaré siempre en mi memoria, ya que tuvo lugar la primera presentación de mi libro El arte de nombrar la vida, en la Casa de la Cultura de mi pueblo, Arahal.
Debe comenzar agradeciendo al personal del Excelentísimo Ayuntamiento de Arahal que hizo posible que está presentación tuviera lugar, comenzando por la delegada de Cultura María Trinidad García y por supuesto a Fran Romo, con que me ha facilitado todas las cuestiones técnicas. También es de recibo mencionar aquí a Antonio Luis Gómez y a Antonio Ortiz, que han puesto su granito de arena para que todo salga bien. ¡Muchas gracias a todos!
La presentación tuvo lugar el viernes a las 19:00 horas, por lo que desde las 18:00 ya estaba en la Casa de la Cultura, preparando que todo estuviera listo junto con Fran. Sobre las 18:30 horas llegaron también Francis Rodríguez y su hijo Ismael, de Librería Buró, cargados con muchos ejemplares de mi libro para montar un punto de venta en el recibidor del histórico edificio por si los asistentes querían adquirir mi obra. También les agradezco a ellos, el apoyo que me están mostrando desde el principio y la promoción que hacen del libro tanto en su propia librería como a través de redes sociales. ¡Muchas gracias!
Sobre las siete menos cuarto comenzó a llegar gente y poco a poco la sala se fue llenando. Mientras tanto los nervios iban en aumento. Amigos, familiares, vecinos, conocidos... fueron sentándose hasta ocupar la totalidad de asientos de la Sala Sevilla, quedando incluso algunas personas de pie al fondo del habitáculo. Fue muy emocionante ver llegar a tantas personas queridas y conocidas para asistir a la presentación de mi criatura.
A las 19:00 h. ya estaba todo listo, y con puntualidad británica, la delegada de Cultura, Trini García, dio comienzo al acto, inaugurando la que sería su primera presentación desde que está el cargo, con palabras muy amables hacia me persona. Trini dio paso a mi amigo David Lobato, quien tenía la responsabilidad de ser mi presentador en el evento y, como ya sabía que ocurriría, fue una presentación muy emotiva y sentida. David es amigo mío desde hace muchos años y me conoce tan bien, que creo que plasmó en su presentación gran parte de mi esencia. Atesoraré en mi corazón esas palabras durante toda la vida ¡Muchas gracias!
Y entonces llegó mi turno. Tenía ante mí la gran responsabilidad de hablarle a mis gentes mas cercanas sobre mi libro y estaba más nervioso que el viernes anterior cuando tuve que hablar ante más de mil personas en Naukas Bilbao 2023. Y es que allí estaban mis familiares más cercanos, mis amigos de la infancia, mis compañeros del instituto y un montón de vecinos y conocidos de Arahal, e incluso de otros lugares, a los que tengo mucho cariño. A todos los que fuisteis a acompañarme en mi presentación, ¡muchas gracias!
El acto se grabó gracias a Eugenio Jiménez, de Medial Tv, que está preparándo el vídeo para que se emita en su parrilla durante los próximos días. Gracias también a ti, amigo.
Durante mi exposición, hice los oportunos agradecimiento a la buena gente de la editorial Almuzara que ha hecho posible que esta obra sea realidad, Antonio Cuesta, Alfonso Orti, Victoria García, Pepe Arévalo... y los amigos que ha colaborado y corregido el libro antes de que saliera. Después hablé del título y del contenido, explicando más o menos de que iba cada capítulo y dando una pequeña muestra en forma de ejemplo o de historia de cada uno de ellos. Me lo pasé muy bien y pronto me sentí como dando una clase en mi instituto o como dando una charla en algún evento de ciencia, y ya mas tranquilo, pude expresarme de la manera que sé, contando historias maravillosas relacionadas con la biología. Ver las caras de satisfacción y de orgullo de mis seres queridos, como Macarena, mis padres, mis amigos... me hizo sentirme muy arropado y muy feliz. Como ya dije al principio, fue un día que guardaré en mis recuerdos con mucho cariño y durante mucho tiempo.
Tras la exposición y un caluroso aplauso, pasamos al recibidor a firmar ejemplares, y dedicatoria tras dedicatoria, firmé un montón de libros, intentando que la firma y las palabras que les dediqué a cada uno fuese totalmente personalizada y acorde a mis sentimientos hacia dichas personas. También disfruté mucho en la firma y pasé un buen rato charlando con todo esa gente que en los próximos días se leerán mi obra. Las sensaciones que estoy sintiendo estos días gracias a esta experiencia están siendo plenamente gratificantes y maravillosas.
La noche terminó estupendamente con una deliciosa cena en el restaurante La Campiña, acompañado por gente estupenda y tras ella, me fui muy contento y orgulloso a descansar y a pensar y reflexionar sobre todo lo que me había acontecido. Creo que fue un buen momento, de esos en los que hay que pararse y darle gracias a la vida por tanto.
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