La vida secreta de las plantas. Mitos, leyendas y bulos botánicos, de Eduardo Bazo Coronilla es un libro para empaparse de cultura. Esta obra, editada por Pinolia, nos descubre veintitrés historias en las que la botánica se relaciona con la cultura popular, la literatura, la música, el cine de una manera brillante que hace que sientas una enorme curiosidad por descubrir cada nuevo capítulo.
Eduardo usa con maestría estos mitos, leyendas e incluso bulos en los que los elementos vegetales son los protagonistas para confirmarlos o desmontarlos y de camino aprovecha para darnos un montón de datos científicos interesantes sobre diferentes especies vegetales.
Los temas que se tratan, sin abandonar a las plantas como nexo de unión, son de lo más diverso. Empezamos encontrando sustancias y alimentos afrodisiacos, así como filtros de amor, para continuar hablando de brujas e incluso religión. También nos habla del apetito, de la saciedad o del culturismo; nos traslada a la cultura japonesa, o a las mezquitas e incluso al mismísimo Hollywood. Hay mitología, maldiciones, fabulas populares, saberes antiguos y conocimientos modernos de biotecnología. Se puede comprobar que no hay margen para el aburrimiento entre estas páginas.
Me han encantado varios capítulos del libro, siendo algunos de los que más los que se refieren a las brujas o al mito de que una ardilla podía atravesar la Península sin bajarse de los árboles, o aquellos capítulos en los que hay referencias a videojuegos, a nomenclatura científica y a etimología.
La vida secreta de las plantas es una más que digna continuación de Con mucho gusto, la obra anterior de Eduardo, que también reseñé en esta página. Se nota que la botánica es una de las grandes pasiones del autor y así queda plasmado en el libro. Ya lo dije en la reseña del libro anterior, que Eduardo era un hombre muy culto, con conocimientos actuales y antiguos, puesto que es una persona a la que le gusta enterarse de los últimos descubrimientos, pero también hablar con la gente para empaparse de la cultura de cada lugar, en particular es especialista en acercarnos el conocimiento de la gente mayor, a la que siempre pone en valor tanto en sus obras como en las conversaciones cara a cara.
Eduardo Bazo, oriundo de Utrera, es biólogo por la Universidad de Sevilla, como yo, pero los derroteros de la vida nos llevaron por caminos separados, él centrado más en las plantas y yo en los animales, hasta que el maravilloso mundo de la divulgación científica nos llevó a confluir y conocernos y desde entonces tenemos una buena amistad. Debido a esa cercanía, sé de buena tinta, que la forma de escribir de Eduardo, mezclando conocimientos antiguos y actuales no es para nada impostada, sino que es parte de la esencia personal de este gran divulgador y mejor persona.
Creo que La vida secreta de las plantas es una buena recomendación para lectura veraniega, tumbado tranquilamente en la playa o piscina, o para lectura de invierno, al calor de la lumbre o tapado con mantas, ya que las curiosidades que cuenta su autor son estupendas para pasar un agradable rato leyendo. Así que, ya sabéis, recomendable 100 %.