El año pasado empezaba escribiendo el post equivalente a este con esta frase: "Menos mal que no soy nada supersticioso, porque este año cumplimos en este blog nada más y nada menos que 13 añitos." y en esos momentos no tenía ni la mas remota idea del año tan complicado que se nos venía por delante. Como cada 9 de enero escribí un post de celebración del "blogcumpleaños" que nació tal día como hoy y mis intenciones eran seguir con el ritmo habitual de publicaciones de este blog. Pero llegó el virus y todo se truncó. Nuestra vida se paralizó y entre las muchas cuestiones que se vieron afectadas, en mi caso fue el dedicar un ratito a escribir posts. Puede resultar extraño que pasando más tiempo en casa no encontrara el hueco para escribir aquí, pero fue así y consecuencia de ello es que en 2020 solo rezan 5 entradas en La Ciencia de la vida.
Hoy cumplimos 14 años y a pesar de todo no pienso dejar de celebrarlo aquí, con la esperanza de que pueda recuperar las publicaciones que tanta vida, tanta alegría y tantos buenos momentos me han dado a lo largo de todo este tiempo. Así que como siempre, dejo por escrito mis buenas intenciones de seguir compartiendo con todos los lectores de La Ciencia de la vida mas biología, frikismo y cuiriosidades desde este modesto rinconcito de Internet.
Este blog nació hace 14 años, mientras ejercía como docente en la provincia de Badajoz, durante un curso para profesores en el que se nos mostraban las bondades de los blogs en las aulas, y poco a poco fue evolucionando y cambiando, llegando a ser bastante popular entre mucha gente y sobreviviendo a la llegada y auge de las redes sociales. Sería un buen momento para su extinción, no lo niego, y he estado tentado a ello, pero como los dinosaurios, se niega a irse del todo, y aún continua aleteando como un pequeño pajarillo indefenso, buscando la oportunidad de resurgir y crecer... Mi idea es que este año pueda servir para compartir de nuevo más temas biológicos mezclados con cine, cómic, dibujos animados, experiencias de vida, charlas de divulgación, vivencias docentes y libros, y el reto es superar las cinco publicaciones del año pasado, así que muy difícil no lo tengo, pero no prometo nada. Desde aquí solo me queda decir que si aún queda algún lector de La Ciencia de la vida, y lee estas letras, quiero darle las gracias y por supuesto quiero pedir disculpas a todos los que esperaban más y se han encontrado el hueco de 2020 casi vacío...
Antigua cabecera del blog |
Otros años he comentado aquí las estadísticas anuales, pero hoy tiene poco sentido. El año pasado me puse como reto llegar al menos a 52 publicaciones, y me quedé en 5... así que este año tampoco haré eso. Si supero esas 5 me daré por satisfecho, pero no quiero ponerme otras metas irreales sin saber aún las dificultades que nos encontraremos este 2021, que tampoco empieza fácil.
En fin, no me enrollo más. Para terminar quiero compartir con vosotros un año más, que a pesar de todo, sigo teniendo muchas ganas de seguir divulgando, escribiendo y creciendo con La Ciencia de la vida. Espero seguir teniendo inspiración, para poder continuar regalando mucha Ciencia y mucha Biología durante mucho tiempo más. Ojalá esto solo haya sido un pequeño paréntesis y al año que viene pueda hacer un mejor resumen...
¡MUCHAS GRACIAS A TODOS!
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