Un año más aprovecharé los meses de verano, a pesar de no haber empezado aún las vacaciones, para publicar mini-reseñas de las lecturas que vaya haciendo, ya que como sabéis los asiduos a este blog, suelo aprovechar julio y agosto para ponerme al día con la pila de libros que voy acumulando durante el año. Este 2019 comenzaremos con el libro de un gran amigo y que se ha estrenado con una obra redonda y muy completa que tengo que reconocer que me ha encantado. Para muestra solo decir que me lo he leído en una tarde-noche, la del pasado sábado 6 de julio, para más datos, y es que empecé a leerlo y ya no pude parar. Se trata del libro Del mito al laboratorio de Daniel Torregrosa.
El libro Del mito al laboratorio trata sobre la inspiración de la mitología en la ciencia, es decir, de como las historias mitológicas han inspirado durante años, y siguen haciéndolo, a los científicos, sobre todo a la hora de poner nombre a inventos, descubrimientos astronómicos o seres vivos. La influencia de la mitología en la nomenclatura científica es brutal, y buena cuenta de ello hemos dado también por aquí en las entradas que titulé en su día Mitobiología (1, 2 y 3)
Daniel hace un extenso repaso por la mitología grecorromana, trasladándonos a esas historias llenas de héroes, dioses, semidioses, monstruos y gente guapa que conforman el extenso folklore griego y romano. Desde Zeus a los titanes, o desde Venus a Psique, multitud de personajes sirven de título a cada uno de los capítulos que comienzan con la historia y terminan con los homenajes en los nombres. Conocemos de esta manera un montón de planetas, satélites, asteroides, naves espaciales, elementos químicos, plantas, animales y seres de todo tipo, cuyos nombres se inspiran en estos personajes ficticios que condicionaron la vida de tantas personas en el pasado.
El repaso es excepcional y nos encontramos a figuras tan conocidas como Perseo, Mercurio, Ares, Neptuno, Caronte, Lucifer, Ariadna, Pan, Helios o Plutón, y a otros no tan conocidos como Níobe, Talos, Procusto, Iris, Magnes, Tea, Tellus, Selene o Ceres, entre muchos más. Cada capítulo se lee fácil y rápidamente y te traslada de épocas pasadas hasta descubrimientos recientes de una manera amena, sencilla, clara y entretenida, lo que hace que tengas ganas de leer el siguiente, y el siguiente, y el siguiente... y cuando te has dado cuenta ya has devorado el libro.
Tras la mitología grecorromana, el autor se va a la mitología nórdica, con representaciones tan importante como la de Thor, para terminar con otras mitologías, de forma muy breve, que hace que nos quedemos con ganas de mas... estoy seguro de que habrá más entregas, porque el libro es tan curioso que se hace muy corto. ¡Dani, queremos más! ;)
El autor del libro es un buen amigo mío, desde hace ya unos cuantos años, y a pesar de la distancia a la que vivimos. Sí, ya lo dije al principio, pero es que ¿a quién no le gusta fardar de amistades como la de Dani?. Además, Daniel Torregrosa es licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Murcia, experto universitario en Toxicología y miembro de la Real Sociedad Española de Química, y por si este curriculum fuera poco, Dani preside la Asociación de Divulgación Científica de la Región (ADCM), a la que tengo el honor de pertenecer. Por supuesto también es un apasionado de la divulgación científica, y lo hace de forma divertida a pesar de su apariencia seria, lo cual es un buen contrapunto que le ayuda en la transmisión del conocimiento científico. Desde hace ya muchos años podemos disfrutarlo y leerlo en su blog Ese punto azul pálido, que se llevo el Premio Bitácoras en el año 2015, y que a día de hoy es uno de los grandes referentes en la blogosfera científica. A Daniel tuve la oportunidad de conocerlo gracias a Naukas, y siempre estaré agradecido de poder contarlo entre uno de mis mejores amigos en el mundo de la divulgación. Y encima tiene unos hijos majísimos y simpatiquísimos, con los que he compartido más de una partida a Pokémon Go.
No sé si a mucha gente le pasará lo que a mí, pero a pesar de ser yo una persona de ciencias, con la vocación biológica clara desde mi juventud, la mitología y la cultura clásica me apasionan también desde siempre. Creo, al igual que el autor del libro, que el hecho de que las ciencias excluyan a las humanidades, o viceversa, es un gran error, puesto que me declaro un férreo defensor de la cultura única, como el propio Dani ha expresado también en varias entrevistas, ya que hablar de dos culturas, ciencias y letras, a día de hoy, creo que no tiene mucho sentido, y ambas van de la mano en muchos sentidos. En Del mito al laboratorio tenemos cientos de ejemplos. A mí me ha trasladado a otras épocas, cuando estudiaba EGB, y los únicos libros que sacaba de la biblioteca del colegio eran dos... uno sobre mitología griega y otro sobre mitología romana. En la ficha de ambos libros quedó para la posteridad el registro de las muchas veces que los saqué y los devolví durante aquellos años. Gracias Dani por haberme traído de vuelta este bonito recuerdo.
Del mito al laboratorio ha sido la primera lectura de libros de este verano, y creo que no he podido tener un mejor inicio lector, porque me ha encantado, aunque esto ya me lo esperaba. Dani Torregrosa ha escrito un libro estupendo, con muchas referencias mitológicas y mucha ciencia. Con un montón de historias de esas que tanto nos gustan y con descubrimientos y seres sorprendentes, de los que normalmente no conocemos. Así que ya sabéis, no dudéis en comprarlo para consumo personal o para regalo, y como digo siempre, que conste que yo no cobro ni un duro por estas reseñas, y tampoco las hago por la amistad que le profeso al autor, de hecho, escribiría lo mismo si no lo conociera, simplemente, cuando leo un libro que me gusta, lo comparto por aquí, por si mi opinión le pudiera servir a alguien.
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